miércoles, 31 de diciembre de 2008

Cuatro años y el mismo dolor (¿ya nos olvidamos?)




El olvido es el disparo a la conciencia. La memoria es el final de la inocencia. Soplen fuerte para generar un viento que no deje que se eclipsen los recuerdos.Traigo leña para que no muera un fuego que no quiere contemplarnos como ciegos. Porque nunca se me va a curar la herida de haber visto cómo se me iba la vida. No omitamos que esa noche de diciembre almas púberes en busca de la gloria se encontraban cara a cara con la muerte a raíz de una vorágine traidora. Que me devuelvan las sonrisas espontáneas. Que, de regalo, puedo dar mi escepticismo. Que es aquel que ha de surgir en la desgracia de sentirse un ingenuo desprotegido. Y que el futuro sólo sea lo que viene y no aquel karma que a mi pánico entretiene. En la cama, por la noche, no estoy solo, pues la culpa es inquilina en mis entrañas. Cuando, en realidad, los dueños de este dolo son políticos de la peor calaña. Pareciera que no ha servido de nada. Sólo hay padres que no pierden la esperanza de acabar la impunidad que es promotora de una rabia que no da misericordia. Que lo escuchen los que creen que en su vida nunca pagarán los costos que le implican. Que se olviden de su intrepidez maligna. Y que nunca, pero nunca se repita... Que nunca, pero nunca se repita... Que nunca, nunca, nunca se repita... Que me devuelvan las sonrisas espontáneas. Que, de regalo, puedo dar mi escepticismo. Que es aquel que ha de surgir en la desgracia de sentirse un ingenuo desprotegido. Y que el futuro sólo sea incertidumbre. Y no la lumbre que amplifique así mi miedo. Reintégrenme el color que habitaba en los sueños. Yo puedo dar un centenar de pesadillas, que son aquellas que dan luz a mi desdeño y quieren empujar un sol que trastabilla. Y que el futuro sólo sea incertidumbre y no la lumbre que amplifique así mi miedo. Y no la nube que me impida ver el cielo.

-"Que nunca se repita": muy lindo tema compuesto por Santiago Aysine, cantante de Insoluble y sobreviviente de Cromañón.-

martes, 25 de noviembre de 2008

Tiro al pichón


El 13 de julio de 2006 la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y UNICEF Argentina presentaron el primer relevamiento nacional sobre niños y jóvenes privados de libertad. ¿Resultados? Surgió que de los más de 20 mil casos que había en ese momento en el país, el 87 por ciento estaba por situaciones de carencia socio-económica. Es decir, no cometieron ningún delito. La provincia de Buenos Aires apareció en dicho informe con el mayor porcentaje de chicos presos: 45,2 por ciento del total.
El trabajo también resaltaba como inadmisible privar de la libertad a los niños por el contexto de pobreza en el cual se desarrollan. Hoy, año 2008, todavía está la incógnita sobre cuándo entrará realmente en vigencia la Ley Nacional de Protección Integral de la Infancia, que –reglamentada en abril de 2006- prohíbe el encierro de menores de 18 años por asuntos asistenciales.
Otro informe sobre el funcionamiento de las actividades del Consejo Nacional de Niñez, Minoridad y Familia (CONNAF) durante el año 2005 reveló graves falencias. La auditoría presentó hallazgos como la falta de documentación identificatoria de los chicos alojados, la existencia de legajos incompletos y la falta de pautas sobre los chequeos médicos a efectuarse al momento del ingreso. También se detectó en ese entonces un alto índice de permanencia y superpoblación en varias instituciones que, además, presentaban falta de profesionales. Se comprobó que los presupuestos asignados no alcanzaban para cubrir los gastos de alimentación, indumentaria y medicamentos. Y se alarmó sobre la imposición de sanciones que vulneraban los derechos del niño.
Aunque los datos sean de hace unos años, no se ve un cambio radical y de origen. Ya creada la psicosis sobre los llamados –mediáticamente- motochorros, hoy se agregó un nuevo episodio lamentable en el marco de lo que ya es una caza de pibes que no tienen la mayoría de edad. Hace unas semanas nadie se preocupó por investigar para saber si el chico detenido tenía realmente algo que ver con el asesinato del ingeniero Ricardo Barrenechea: muchos titularon en televisión “Cayó el autor del crimen del ingeniero”, o cosas por el estilo.
Hoy, dos chicos de 17 y 19 años que andaban en moto y, según dichos de familiares y amigos, iban hacia una fiesta en Costa Salguero, fueron perseguidos y baleados por la Policía Federal. En un primer momento se dijo que un oficial había sido herido de arma de fuego por uno de ellos. Luego, según afirmó el padre de uno de los chicos antes las cámaras en una entrevista y después de chequearlo con el Hospital Churruca, resultó que el uniformado se había lastimado con el casquillo de una bala que él mismo disparó pero que se trataba de una herida menor y estaba fuera de peligro (muy diferente a la versión que se había dado al principio, en donde se aseguraba que el agente estaba gravemente herido).
Así el panorama, hay quienes siguen insistiendo con la institucionalización, muros, barrotes y rejas . . .




lunes, 24 de noviembre de 2008

Proyecto Kiwi, la travesía de tres periodistas argentinos

El viaje despierta interés. En ellos, tres jóvenes periodistas argentinos, y por estos lados también, por los lugares tan exóticos de Asia que recorrerán. China, India, Tailandia, Malasia, Singapur, Indonesia, Vietnam, son algunos de los probables destinos planteados originalmente. Antes pasarán por Oceanía para luego emprender camino hacia el más extenso continente del planeta.
Santiago López, Martín Weisz y Diego Salamone armaron el sitio http://www.proyectokiwi.com.ar/ para mostrar lo que seguramente será un excelente trabajo periodístico, con las particularidades de un mundo tan lejano y curiosidades del día a día del otro lado del mapa.


jueves, 21 de agosto de 2008

Maquillaje


“Le hemos sugerido que hable como mujer, que sea más simpática, que sonría más, que mire con atención a quienes le hablan y que sea más tierna. No le dijimos cómo vestirse”, aseguró a Perfil.com uno de los asesores más influyentes de Cristina Fernández.
Desde la asunción del nuevo jefe de Gabinete, Sergio Massa, –casualidad o no, ¿quién sabe?- se vienen dando algunos cambios en el manejo desde el Ejecutivo. Hubo algunos encuentros –no conferencias- con la prensa, que increíblemente fueron celebrados por algunos periodistas; cambios de look de la Presidenta en busca de mayor sobriedad en sus presentaciones, y menor exposición de su marido, Néstor Kirchner, para terminar de escuchar de una vez las acusaciones de “doble comando”. Muy forzado, muy superficial.

Empezó el juicio


"Volver al origen de lo eterno

tal es nuestro sino

es el tiempo,

la naturaleza de lo humano

y el último misterio del destino.

Así la muerte

es sólo volver

al germen de la semilla,

que vivirá en un tiempo nuevo.

Los nuestros

transfigurados por la memoria añil,

han vuelto a la eternidad

de donde se desprendieron como frutas.

Empero pueden escapar de nuestros sueños,

para ofrecernos su mágica presencia.

Tienen ese milagroso poder

esa rara virtud.

Son luz que reconforta,

alumbran nuestro camino de abrojos,

nos acompañan sus golondrinas

azules por la pena

y fulguran en todo lo que nos rodea".

(poema leído en la misa en Perú por los hijos de Utopía y los hijos de Cromañón)

lunes, 11 de agosto de 2008

No me dejan dormir . . .


¿Por qué la gente se pone tan romántica y cursi en los fotologs?

¿Por qué después no se dicen en la cara todas esas cosas?

¿Por qué a todo el mundo le gusta el reguetón y hasta se emociona con las letras?

¿Por qué ya nadie escucha rock en los autos?

¿Por qué duran tanto las pausas de las películas en AXN?

¿Por qué la música de Rocky sigue teniendo ese no sé qué . . .?

¿Por qué le hicieron más de 20 veces la misma entrevista a Borghi desde que llegó?

¿Por qué el circo mediático del deporte llegó ahora a la política?

¿Por qué ya nadie usa remera 3 / 4?

¿Por qué hay gente que dice “men” o “man”? ¿Dónde quedó el “chabón” o “loco”?

¿Por qué el precio sube y se fuma cada vez más?

¿Por qué ahora hay pibes que usan remeras con escote?

¿Por qué los chilenos usan tanto la palabra “importante” ?

¿Por qué hay gente que va con el paraguas abajo del techito? (clásica)

¿Por qué hay algunos que, en el subte, usan la escalera común para bajar si tienen la mecánica funcionando?

¿Por qué ponemos tanta cara de bobo cuando tomamos con pajita?

¿Por qué nadie hace nada ante la invasión de floggers?

¿Por qué Ticketek nos cobra esos malditos tres pesos?

¿Por qué cuando vemos a Laport, vemos a Guevara?
-Como siempre, si tenés alguno más, agregalo y sumate a uno de los clásicos del blog.-

domingo, 13 de julio de 2008

“Hice lo que no hizo el juez: firmé mi libertad”


Lo llaman “el rey de las fugas”. Gozaba de salidas transitorias y no regresó a la cárcel. Lo buscan varias fuerzas de seguridad. PáginaI12 lo entrevistó en la clandestinidad. El resultado: una charla en la que explica su visión de los hechos. Por qué reincidió, qué le reclama a la Justicia, cómo ve su futuro.


Por Carlos Rodríguez

Se lo nota ansioso, con ganas de hablar, pero su discurso sale con fluidez. Se empeña en aclarar, con argumentos jurídicos, que lo suyo “no fue una fuga”, aunque sabe que para la Justicia, la policía y buena parte de la sociedad “no importa lo que yo exprese, porque para ellos soy Satanás”. Insiste en que fue injusta, como lo determinó la Sala Tercera de la Cámara de Casación bonaerense, la condena a 33 años que le habían aplicado en diciembre de 2005 y que fue reducida a 25 años en noviembre de 2007. “Por lo que hice me podían dar 16 o 17 años de cárcel. Me dieron 25, pero igual, si aplicaran las leyes como corresponde, mi condena ya estaría cumplida.” El que habla en exclusiva con PáginaI12, desde la clandestinidad, es Daniel Agustín Cabrera, Tractorcito, el ladrón de bancos que volvió a ser noticia el 1º de julio, cuando se supo que había incumplido el régimen de salidas transitorias y no había regresado a la Unidad Penal 19 de Ezeiza. La visión de Tractorcito es otra: “¿Cuántos años quieren que esté preso ilegalmente? Ahora, hasta dicen que me fugué. Simplemente hice lo que no hizo el juez: firmé mi libertad”.
Durante la entrevista personal concertada telefónicamente a través de terceras personas (ver aparte), Cabrera hizo una larga valoración jurídica de su condena y arremetió contra el juez de ejecución penal de Mar del Plata Esteban Ignacio Viñas. “Me prometió que en abril me iba a pasar al régimen de ‘prisión discontinua’ que me iba a permitir salir desde el lunes hasta el viernes, regresando a la cárcel los fines de semana. Seguí saliendo sólo tres días por semana, seis hora por día, lo que no me permitía ni estudiar ni trabajar.” Su enojo lo expresa con la voz cortada y los ojos rojos (no se permite a sí mismo llorar en público): “¿Para qué me hizo ilusionar, si después no me dio nada?”
Cabrera parece entero, pero sabe que está en el laberinto de una vida signada por su infancia en la calle, sin padres, su ingreso en el mundo del delito (su “etapa de salvaje”, dice) y su intento por ser “una mejor persona”. En la entrevista se pregunta: “¿De qué me sirvió estudiar y soñar una vida mejor, cuando la Justicia te cierra todas las puertas y muchos están deseando que vuelva el “ícono” Tractorcito?”.
–A partir de las noticias que se habían publicado, se esperaba que pudiera rehacer su vida, ser abogado, trabajar. No se entiende por qué decidió romper con el régimen de salidas transitorias. ¿Por qué lo hizo?
–No se trata de lo que piensa o de lo que cree la gente. Se trata de la vida de un hombre. Dentro de las normas legales, yo tendría que estar en libertad hace dos años. Como eso no se dio, vengo soportando una injusticia jurídica, a pesar de hacer las cosas como se dice que las tengo que hacer. Hay otras personas que no hacen las cosas como corresponde, pero son señores a los que hay que respetar porque es la palabra de “vuestra excelencia”. Las leyes no deben ser objeto de interpretación, sólo tienen que ser aplicadas.
–¿A qué se refiere concretamente?
–Hay muchas cosas que se dieron. Estoy detenido desde 1995. Estaba vigente la Ley 24.390, que establecía el cómputo del dos por uno por cada día de cárcel después de los dos años sin condena firme. Yo tuve dos fugas. De la última me recapturaron el 3 de noviembre de 2000 en Bahía Blanca. La ley del dos por uno caducó el 1º de junio de 2001. Como las leyes no se pueden aplicar en forma retroactiva, a mí me corresponde el cómputo del dos por uno. Por eso, a la fecha, estaría cumpliendo 24 años de cárcel. Casi los 25 que me dieron de condena.
–Todavía le quedaría un tiempo para cumplir la pena.
–Cuando redujeron la pena de 33 a 25 años, con mi abogado (Silvio Ramón Duarte) presentamos una apelación ante la Suprema Corte bonaerense para que se aplique, en mi caso, la normativa de modificación de la Ley 23.886, en su artículo 189 bis, que es la quita de la pena por tenencia de armas de guerra. En mi caso, me tendrían que sacar tres años de la condena de 25. Dicho de otra manera, me tendrían que computar cuando menos 27 años de cárcel. Por eso le pedimos a la Suprema Corte provincial que decrete mi excarcelación por cumplimiento de la pena.
–¿Por qué no siguió la batalla legal sin romper, como lo hizo, con el régimen de salidas transitorias?
–Esto se produjo por las promesas incumplidas. Por los hombres que dicen tener palabra y no la tienen. Yo tuve una entrevista, el 20 de diciembre del año 2007, con el juez Esteban Ignacio Viñas. El me dijo que me iba a dar mis salidas transitorias, que iba a pasar las fiestas con mi familia y que posteriormente, en el mes de marzo, me iba a modificar mis salidas para que yo tuviera permiso legal para ir a la universidad, para ir a trabajar y para seguir afianzando mis lazos familiares. Cuando me dijo eso, yo creí en el hombre y creí en la Justicia.
–Esa promesa no se cumplió.
–Puse todo mi empeño para cumplir con la ley y la palabra del doctor Viñas. El mismo me dio permiso para que me inscribiera en la Universidad Ke-nnedy. El lunes 14 de abril comenzaban mis clases. Se me dio también el permiso para ir a trabajar al estudio del doctor Ernesto Vissio, que cubrió todos mis gastos de la inscripción en la universidad y mi matrícula. Debía trabajar de lunes viernes, en el horario de 8 a 18, para después ir a la universidad desde las 19.15 hasta las once de la noche. Viñas jamás me modificó el régimen de salidas. Nunca pude ir a la universidad y tampoco a trabajar en el estudio de Vissio, en San Justo. Lo único que me dio fueron seis horas diarias, de 14 a 20. No tenía tiempo ni para trabajar ni para estudiar.
–¿Cómo hacía para mantener a su familia?
–Mis recursos son muy escasos. Se me fueron los pocos ahorros que tenía y ni siquiera podía alimentar a mis hijos. No le podía pagar la cuota en el colegio a mi hijo menor. Cortaron el teléfono y la luz en mi casa. No es una excusa. Hay personas que tienen otra realidad. La mía es la que estoy planteando. Creo que lo único que están buscando con todo esto es encontrar la forma de que el icono resucite. Van a tratar de ponerme allá arriba de los estrados judiciales para poder juzgarme y condenarme, para poder decir que he cometido otros delitos, que he hecho algo que no corresponde. Recién allí, todos van a estar satisfechos, van a estar contentos. Todos van a poder decir, como hacen siempre, que el árbol que nació torcido jamás se puede enderezar.
–¿No les está dando la razón al interrumpir el régimen de salidas transitorias?
–Los cambios vienen de adentro de uno mismo. Hay que darle otra mirada al sistema blumberiano. Ellos dicen que tienen que destruir a todos los pobres y los pocos que puedan quedar vivos tienen que ser esclavos de ellos. Yo no puedo ser esclavo de nadie. Sin embargo, siempre fui un esclavo del sistema. Todos creen conocer a Tractorcito, pero no saben lo que hay adentro del ser humano. Ellos creen que soy Satanás, que soy Aladino, pero soy solamente un hombre. Un hombre dispuesto a cualquier cosa, incluso a entregarme si ellos me lo piden, pero si ellos me cumplen dándome la libertad basándose en el artículo 317, inciso segundo, del Código Penal. Una excarcelación por agotamiento de pena en estado de detención. Eso es lo que le pedimos a la Suprema Corte bonaerense. Quiero que me hagan un cómputo real con las normativas legales vigentes.
–La Justicia es lenta y en el caso de un ladrón famoso, hay una presión mediática y social que hace las cosas más complicadas.
–Si lo sabré... Me condenaron a 33 años de prisión en forma ilegal, por un artículo que no corresponde a mi caso. El artículo 227 ter del Código Penal es por terrorismo de Estado, cuando yo jamás he matado a nadie. No tengo una sola causa por lesiones ni graves ni gravísimas, ni siquiera por resistencia. Mis delitos son comunes. Robo a mano armada. evasión, adulteración de documento. Lo máximo que se me podía aplicar, dentro de las normas jurídicas, es 16 o 17 años. Me dieron 33 años. Eso no existe. No lo digo yo, lo dijo el fiscal de la Cámara de Casación tercera, que debe ser un erudito en el tema. El fiscal debe pedir el máximo de la pena. pero en mi caso el mismo fiscal dijo que era una pena tortuosa. Que era una pena de muerte la que me aplicó el juez. Si lo dice el fiscal, qué debo decir yo dentro de mi ignorancia jurídica.
–¿No podía esperar el fallo de la Suprema Corte? ¿No era una mejor opción que la de romper el régimen de salidas transitorias?
–Esperé dos años y medio a que me redujeran la pena a 25 años. Ahora tendría que esperar dos o tres años más y seguramente tendría que presentar una nueva apelación ante la Corte Suprema Nacional, que era a donde queríamos llegar. Todo este tiempo debería computarse doble. ¿Cuántos años quieren que esté preso ilegalmente? Ahora, hasta dicen que me fugué. Simplemente hice lo que no hizo el juez: firmé mi libertad.
–¿Siente que es eterna la condena que pesa sobre Tractorcito?
–Yo respeto a los organismos, al Servicio Penitenciario, a los jueces, a los fiscales y a todo el periodismo. Respeto la amplitud de conocimientos que tienen los periodistas, pero se desprende que algunos no conocen nada. Te juzgan y prejuzgan, desde su punto de vista, desde su escritorio. Ahora dicen que yo trabajaba y estudiaba. Eso no es cierto, porque nunca se me dio el permiso para poder hacerlo. No averiguaron donde correspondía, pero hablan. La decisión que tomé no es apresurada. Yo creo que he cumplido con mi pena, pero no lo digo de soberbio, sino porque lo he sufrido y porque conozco un poco el tema jurídico.
–¿No se arrepiente de su decisión actual?
–Es doloroso que un hombre que nunca creyó en nada, de pronto crea y ponga todas sus fuerzas porque piensa que puede creer. Ponés todas tus ganas, tus fuerzas, tu voluntad, aprendés a escribir en una computadora, trabajás en talleres literarios, en talleres de manualidades, en talleres de arte, hacés la primaria y la secundaria, te inscribís en una carrera de abogacía, tenés la posibilidad de trabajar en un estudio jurídico, se te abren casi todas las puertas, pero el juez te cierra todo y no te deja. He logrado lo máximo en conducta y en concepto: 10-10. ¿De qué me sirvió? ¿Para qué sirve todo este desarrollo del conocimiento, si cuando ellos tienen que estimularte, ayudarte a organizarte y apoyarte, te cierran todas las puertas? Me parece que todo es un farsa y una gran mentira.
–¿Lo hace responsable al juez Viñas?
–Cómo puede ser que un juez que te dice que te va a ayudar, te ayuda a cagarte la vida. Te la complica. Es que no es su vida. ¿Los jueces son para todos iguales? A veces preferiría haberme quedado en la ignorancia, porque las cosas que aprendí, en lo jurídico, no se aplican como debería ser. La ley de Blumberg es para encerrar a los pobres, a los chicos cuando cumplen los 12 años. Es como matarlos, como sentarlos en la silla eléctrica o meterlos en la cámara de gas.
–¿Qué opina del tratamiento que le dio la prensa a su decisión de no volver a la cárcel?
–Muchos periodistas me odian. Gente de Radio 10, de Canal 9, muchas personas. Yo no los conozco. Hablan de mí como si me conocieran y yo nunca los vi. ¿Tan sabios son? ¿Tan grande es la capacidad que tienen en su mente para poder conocerme? ¿Por qué pierden el tiempo en ser periodistas? Con ese poder podrían ayudar a la gente. Con esos conocimientos adquiridos de la nada, podrían ocuparse de la realidad, en vez de desinformar. Eso les debe dar la posibilidad de vivir bien, de tener mucho dinero. Yo siempre me hice cargo de lo que hice y lo pagué. Eso me hizo sentir bien. Ellos no tienen derecho de mentir sobre mí.
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Casarse “de blanco” y con los hijos
Por Carlos Rodríguez

A pesar del momento que vive, Daniel Agustín Cabrera asegura que sigue viendo “una vida buena” en el futuro, lo que incluye casarse “de blanco” con Liliana, su actual pareja, y estar al lado de sus cuatro hijos, sobre todo de Marquitos, el menor. Afirma que las cárceles “se alimentan de seres humanos” y que “la muerte de un malviviente tiene un efecto ‘terapéutico’ para los bienvivientes”.

–Si vuelve a la cárcel va a perder todos los beneficios.
–Las cárceles se alimentan de seres humanos. Muchos pobres terminan en las cárceles. Mucha gente sufre. El preso y su familia, para cubrir a veces tantas mentiras del poder, de la corrupción judicial o policial.
Me han robado casi toda mi vida o me la he robado yo. A veces no lo entiendo. Mi cara es visible y si en algún momento llegara a cometer algún delito, las personas me identificarían. Claro que también hay personas que están dispuestas a declarar, a ser testigos porque están preparados y están pagados para hacerlo. Muchos quieren salir en la foto diciendo que fueron los que detuvieron a Daniel Agustín Cabrera.
–¿Se refiere a la policía?
–A todos los organismos. Puede ser un fiscal, un juez, un policía, un gendarme. Y si tienen la posibilidad de “aclarar” algún hecho, también lo van a hacer. Y si es posible, van a decir que estuve en un enfrentamiento, aunque no haya existido, porque jamás ando con armas encima. Cualquiera puede estar dispuesto a presentar la mesa servida. La muerte de un malviviente tiene un efecto terapéutico sobre los bienvivientes. Parece que los cura y todos aceptan lo que dice la policía. Eso, aunque se ha demostrado en cientos de casos que todo fue inventado. Casos de gatillo fácil, de “errores” donde siempre resulta muerto alguien.
–¿Cómo ve su futuro?
–Mi futuro es muy difícil, pero siempre les hice frente a la vida y a los desafíos. Igual sigo teniendo una sonrisa en los labios y sigo viendo una vida buena. Poder casarme con la mujer que amo. La veo vestida de blanco. Poder estar con mis hijos, acompañarlos. Estar con Marcos, con Jorge, con Sol, con Cristian, poder esperar algún nieto, poder recibirme de abogado. Es poco lo que puedo aspirar. Eso más allá de que me busquen o no me busquen, de que me agarren o no me agarren. Yo voy a tratar de estar lejos de todos y cerca de los míos. Pienso reunirme con mis abogados y que sigan pidiendo mi excarcelación. Si se me da, voy a poder retornar a mi casa, volver a estar con mi hijo.
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La historia de esta nota
Por Carlos Rodríguez

La voz en el teléfono fue escueta y contundente: “Tractorcito Cabrera quiere hablar con vos. ¿Querés hacerle una entrevista?”. Después de la inmediata respuesta positiva, siguieron nuevos llamados, un lugar de encuentro y la cita, a solas, en un auto estacionado en un lugar de la provincia de Buenos Aires. Con Daniel Cabrera nos conocemos desde enero de 2001, cuando le hice la primera nota. En el auto encontré al mismo hombre que entrevisté en la cárcel, deseoso de leer y de estudiar, pero ahora con muchos más conocimientos, de cultura general y de cuestiones jurídicas.
Lo había visto varias veces en su casa, con su mujer, Liliana, y su hijo menor, Marquitos. Era muy convincente cuando decía que quería rehacer su vida. Por eso la sorpresa cuando decidió no volver a la cárcel. Recordé sus deseos de libertad, lógicos, cuando estaba en la Unidad 1 de Ezeiza. Cuando deliraba con que su mujer lo rescatara en helicóptero, como había ocurrido una vez en un penal de Francia.
Sus urgencias eran las de tratar de demostrar que ya cumplió su pena, que ya hizo todo lo que tenía que hacer para estar libre de nuevo, sin ninguna traba. Llevaba consigo una bolsa plástica con los fallos recientes que lo involucraron y un Código Penal al que citaba en forma permanente. Cada afirmación suya, respecto de sus causas, merecía una recorrida por el texto del Código, para corroborar que los artículos y los incisos citados en la entrevista eran los correctos. Me dejó la impresión de un hombre que se muestra duro, pero que sabe de fragilidad y de peligro. Un hombre que necesita un bote salvavidas. Siempre repite la misma máxima: “La ley es como las serpientes: sólo muerde a los que andan descalzos”.
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Una carrera hacia el podio
Por Carlos Rodríguez

Si se hiciera un ranking de ladrones famosos Daniel Cabrera, Tractorcito, estaría en algún lugar del podio. Se crió con su madre y algunos de sus hermanos. A su padre no lo conoció. Tuvo un padrastro que –dice– lo ataba a una silla y lo golpeaba. Confiesa que compró un arma con la idea de asesinarlo. No pudo. Sólo lo amenazó de muerte si seguía golpeando a su madre y se fue de la casa materna. La primera vez que robó, siendo niño todavía, cayó preso en Ingeniero Maschwitz, partido de Escobar. Un mal comienzo. Su carcelero fue un joven policía llamado Luis Abelardo Patti, luego también famoso, pero como torturador.
Muchos años después, cuando ya era conocido por robar bancos, quisieron endilgarle el asalto a un camión cargado de pescado. “Yo no sé robar pescado. Para hacerlo, debería conocer cómo comercializarlo y no lo sé. Yo sólo robo bancos.” De ese robo lo absolvieron. Los propios policías que lo persiguieron reconocen que es “un ladrón con códigos, de los de antes”. El se define a su manera: “A las viejitas hay que ayudarlas a cruzar la calle. Yo no robo a viejitas ni trabajadores, robo bancos que tienen todo el dinero asegurado”.
Tuvo dos fugas históricas. En 1998, con otros chorros famosos como él, se largó de la cárcel de Devoto. Se hizo pasar por abogado y salió, muy trajeado, por la puerta principal, que da a la calle Bermúdez. No es raro que ande bien vestido. Tiene decenas de trajes y centenares de camisas y corbatas compradas en “la buena época”. Su fuga cumbre fue el 17 de septiembre de 2000. Se escapó del Departamento Central de Policía. Salió caminando por la puerta principal, de Moreno 1550, y se tomó un taxi. Se “abrojó” a una fuga planeada por los paraguayos Luis Alberto Rojas y Fidencio Vega Barrios, acusados por el crimen del vicepresidente del Paraguay Luis María Argaña. A Tractorcito lo condenaron, finalmente, a 25 años, por robos a mano armada. Dicen que formó parte de la banda de Luis “El Gordo” Valor. El lo niega. “Lo conozco, pero nunca estuve en su banda. Soy independiente”, aunque aclara, por las dudas, que es hincha de River Plate.


Nota de Carlos Rodríguez para Página 12.
Foto de Marisela Mengoechea.

jueves, 3 de julio de 2008

Se lo dedico a . . .

-Jorge Lanata, director del diario Crítica de la Argentina, en la entrega de los Premios Martín Fierro 2008.-

¿Quién era Brian Jones?



“Introvertido, paranoico y resentido hacia cualquier forma de autoridad", dicen los informes de colegio del alumno Lewis Brian Hopkin-Jones, nacido en Cheltenham el 28 de febrero de 1942. La misma banda que hoy, a 39 años de su muerte, sigue de eterna gira, alguna vez debutó con el nombre de Brian Jones and The Rolling Stones una noche del verano del 62. El nombre fue propuesto por él mismo, inspirándose en el tema de Muddy Waters: Rollin’ Stone Blues. Para que se tenga magnitud de lo que significó la muerte de este músico, más allá de lo que pasó ese 3 de julio de 1969 y el misticismo alrededor de su partida.

Líder y hasta, ¿por qué no?, manager de la banda, ejercía ese rol desde su carisma y hasta cobraba –de manera secreta- un adicional de cinco libras semanales por ser la cara visible, Multiinstrumentista, amigo de Bob Dylan, Jimi Hendrix y John Lennon, con estilo pop (que incluía tapados y bijouterie), a los 17 años ya era dos veces papá. Fue el único integrante de los Stones en participar en un tema de los Beatles: tocó el saxo alto en You know my name. Y el primer rocker en pararse frente a un tribunal por un tema de drogas, en 1967. Y uno más en morirse a los 27, junto con Jim Morrison, Jimi Hendrix, Janis Joplin y Kurt Cobain. Jamás firmó una canción, su voz no se escucha en ninguno de los discos, aunque fue partícipe de, quizá, la mejor etapa stone, entre 1962 y 1969.

Aportó su dinámica en temas como Lady Jane, Paint it black, Ruby Tuesday. “Brian era un tipo que podía tocar cualquier instrumento. Es él quien toca las marimbas en Under my thumb y el melotrón en Satanic Majesties. Brian es las cuerdas de 2000 light years from home y los vientos de We love you, todas esas ondas árabes. Era una de esas personas que son tan hermosas en un sentido y tan pendejas en otro”, dijo alguna vez Keith Richards.

Mucho se dijo. Que el alcohol, que las drogas. Que su vida siempre al límite. Cuando murió, Brian ya no era miembro de los Rolling Stones: el 8 de junio de 1969 y antes de salir de gira por Estados Unidos, Jagger, Richards y Charlie Watts lo echaron de la banda (sería reemplazado por Mick Taylor). El informe policial dijo que fue sacado inconsciente del fondo de la pileta de su casa en Cotchford. Anna Wohlin -su novia- le hizo respiración artificial, pero era tarde. Siempre se sospechó de Frank Thorogood, un albañil de 44 años que hacía trabajos de refacción en la mansión de Brian. La película Stoned, del director británico Stephen Woolley, quien dedicó once años de su vida a este proyecto, afirma esta hipótesis: “Estoy convencido de que fue asesinado. No pienso que fue por el alcohol y las drogas”.



Oda a los ángeles -

Soy un habitante de una ciudad
Acaban de darme el papel del Príncipe de Dinamarca
Pobre Ofelia
Los fantasmas que él nunca vio
Vagando hacia su funesto destino
En un candelabro
Vuelve, guerrero valiente
Sumérgete
En otro canal
Una cálida piscina resbaladiza
Dónde está Marrakech
Bajo las caídas el vendaval
dónde han ido a parar los salvajes
al atardecer.

-Poema escrito por Jim Morrison en homenaje a Brian Jones. Se repartía en los shows que daba The Doors en Estados Unidos.-

miércoles, 2 de abril de 2008

Intimidación oficial (y muy peligrosa)

-Este es el dibujo de Hermenegildo Sábat que salió ayer en Clarín y enojó a Cristina Fernández de Kirchner en su discurso-
"Hoy pude ver en un diario, donde colocan mi caricatura, donde tenía una venda cruzada en la boca, en un mensaje cuasimafioso. ¿Qué es lo que no puedo decir, qué es lo que no puedo hablar al pueblo argentino?".

26 años


sábado, 29 de marzo de 2008

Todo dividido dos


Más retenciones. Y más división. Un speech que empieza a generar y otro –aún peor y más criticable- que vuelve a separar. O a favor o en contra, esa es la cuestión. A favor del campo o a favor de Videla. Sin grises. Y sin alimentos. Y con cortes de ruta.
¿El periodismo? Según esa voz del palco, el enemigo y culpable de casi todos los males. En la realidad, cacerolas que no suenan ni se ven en pantalla –pero sí en varios barrios de la Ciudad de Buenos Aires-, títulos como “La furia del campo” y preguntas que no ayudan a construir. Sólo a mostrar. A mostrar lo que se quiere mostrar. Y nada más. Cables de noticias que no llegan. Patotas que pegan, insultan, y copan la parada. Para que se vayan de la Plaza esos violentos manifestantes con objetos plateados y contundentes en sus manos. Sangre. Y de nuevo la confrontación. Eso que tanto querían.
Varios apoyaron al campo desde su lugar en la ciudad. Y muchos otros aprovecharon para que su descontento salga a flote. Y que se vea. Que se vea que no están con este Gobierno. Y más bocinazos. Más descontento. Y leche tirada al asfalto de Luján. Mucha regalada por los propios productores en Lincoln. Tomates que llegan podridos al Mercado Central. Y la imagen que duele.
Que se arregle. Por favor. El tan buscado diálogo -ese que apareció sólo en la segunda parte del discurso- ya se empezó a llevar a cabo. Pero ahora se lee que el paro seguirá. Se piden “propuestas reales”. Y si continua, veremos lo mismo. Más comida en el piso. Ruralistas vs. camioneros. Más provocación. Más confrontación. Basta.

miércoles, 12 de marzo de 2008

¿Por qué? (ahora en deporte)


¿Por qué el que levanta la mano pidiendo off side es el que siempre habilita?
¿Por qué hay gente que le dice orsai?
¿Por qué algunas camisetas suplentes son tan feas?
¿Por qué Independiente usa una remera casi celeste?
¿Por qué no ponen ascensor para subir a la tercera bandeja de la Bombonera?
¿Por qué los bielsistas también son lavolpistas?
¿Por qué en el tenis femenino sólo se habla de la belleza de las mujeres y no del juego en sí?
¿Por qué hacen jugar partidos de ascenso los martes a la noche?
¿Por qué los pantalones de fútbol en los 80 eran tan cortos?
¿Por qué los hinchas de River gritan “de acá de Núñez”, si el estadio queda en Belgrano?
¿Por qué se le dice “paladar negro” al hecho de insultar sin razón?
¿Por qué en el voley es tan necesario reunirse para festejar todos los puntos?
¿Por qué el rugby es prácticamente el único deporte en donde se festeja y aplaude cuando se tira la pelota afuera?
¿Por qué hay gente que va a la tribuna a comentar el partido los 90 minutos?

Si se te ocurre alguno más . . .

martes, 11 de marzo de 2008

¿Publicidad encubierta o iniciativa individual?


De una u otra forma, este jueves vuelven los lentos. La convocatoria esta hecha para las 20 horas en el Planetario del barrio de Palermo. ¿La consigna? “Juntarnos todos (solteros, solteras, piratas, parejas oficiales, ex parejas) a bailar lentos frente a la bola de espejos más grande del país”.
¿Se verán carteles de Doritos? La respuesta, en unos días, cuando se concrete por intermedio de un blog - http://quevuelvanloslentos.blogspot.com/- el Día de la Vuelta de los Lentos.

lunes, 25 de febrero de 2008

Palermo, eje de una promoción que falsea la realidad

-Foto CeDOC -

Por motivos comerciales, el "Loco" y los hinchas de Boca pueden festejar el domingo un hecho que no está tan cerca de ocurrir como se dice.

La campaña ya está montada. Todos se preparan a festejar el gran acontecimiento. Especialmente, algunas empresas, que sin dudas harán su agosto gracias a ese gol que, en teoría, permitirá a Martín Palermo igualar a Francisco Varallo como máximo goleador de Boca en torneos oficiales de la era profesional. En ese negocio reside la gran explicación de algo que, lejos de pretender reflejar fielmente una verdad histórica, se trata simplemente de una operación de prensa y marketing que intenta sacar réditos económicos de un modo cuanto menos antojadizo -si no premeditadamente erróneo e injusto- de contar los tantos convertidos por uno y otro goleador. El "error", si es que se trata solamente de eso, consiste básicamente en mezclar sandías con melones, tomando en cuenta tanto aquellos goles que el actual "nueve" boquense convirtió para el club por el campeonato de Primera doméstico como los que hizo por las distintas copas internacionales que disputó. Lo correcto, efectivamente, sería establecer como unidad de medida no cualquier gol "oficial", sino solamente los marcados por el torneo local. Y es que sólo así, sobre la base de una competencia en la que todos los futbolistas de un club pudieron participar con cierta regularidad similar, pueden establecerse comparaciones realmente ecuánimes e imparciales entre los de la época actual y otros del pasado.
Debe tenerse en cuenta que hasta 1960 no existían copas internacionales oficiales como la Libertadores, la Intercontinental o la Sudamericana, por lo que -se lo haga intencionalmente o no- considerar esos certámenes para una estadística que incluya jugadores de todos los tiempos es dar un "hándicap" importante a aquellos que las jugaron.
De esa manera, además, las chances de figurar al tope de los futbolistas dependen no sólo de sus potencialidades, sino de la suerte que hayan tenido de integrar planteles que intervinieron en torneos organizados por la CONMEBOL u otras confederaciones. Es decir, se establece un criterio que desvirtúa totalmente la función comparativa que la estadística debe tener, al no medirse con la misma vara lo hecho por unos y otros.
Ahora bien: si en el caso de Palermo se toman en cuenta no sólo los 149 goles que marcó por el campeonato local, sino además los 30 que obtuvo en la Libertadores y otras copas por el simple hecho de que "también son oficiales", ¿por qué a Varallo no se le consignan, aparte de los 180 que convirtió en el certamen tradicional de Primera, los 14 que conquistó en otros torneos oficiales de su época como la Copa Competencia, la Copa Beccar Varela y la Copa Adrián Escobar, que le permiten sumar un total de 194?
Semanas atrás, una respuesta muy potable hubiera sido "por desconocimiento". Pero hoy, después de las aclaraciones aparecidas en perfil.com y otros medios al respecto, habría que remitirse más a lo dicho al principio de esta nota para entender semejante omisión.
También, por supuesto, están quienes falsean la realidad, diciendo que aquellas copas que jugó Varallo no eran en realidad oficiales porque "no eran importantes". Dos mentiras en una: primero, porque esos torneos sí eran muy importantes y recibían una gran atención por parte de la prensa y el público; segundo, porque, aunque no hubieran sido trascendentes, su oficialidad no puede ser objeto de interpretaciones o de discusión, desde el momento en que se trató de competencias organizados por la AFA o las otras asociaciones que antes de 1934 rigieron el fútbol argentino.
La verdad, en definitiva, es muy simple: Varallo le lleva a Palermo aún 31 goles si se toman en cuenta los que ambos hicieron en el torneo local, y 15 si a ello se le suman los convertidos por uno y otro en copas oficiales. Por más que una línea especial de botines, ediciones extras de revistas y otros productos ya estén en las gateras para conmemorar otra cosa.

domingo, 10 de febrero de 2008

"Lavagna es un viejo impostor"


"Quedó claro quién era. Un viejo impostor, ariete de la corporación política para impedir el ballottage. Me alegra que finalmente se limpie la oposición de impostores. Quedó también claro que el poder, en materia de política y de negocios, es Kirchner, y la presidencia es una vicaría solitaria".
Elisa Carrió -en el diario La Nación-, sobre la alianza de Roberto Lavagna con el ex presidente y los primeros meses de mandato de Cristina Fernández.

martes, 5 de febrero de 2008

Que se vayan todos


Si el fútbol de Argentina fuese un enfermo terminal, parecería que le quieren desenchufar el cable. El dominó viene de hace rato: la prohibición para que los hinchas visitantes vayan a los estadios del tan abandonado ascenso, la reducción en la Primera A, el paquete televisivo con ganancias tan mal distribuidas y la inminente implementación de las entradas personalizadas -que de aplicarse a la ligera resultará un sistema fácil de corromper-. En el país donde todo sube menos los sueldos, ahora se agregó esta increíble decisión de la AFA (léase todos los dirigentes o la mayoría, no sólo Julio Grondona) de aumentar las entradas ex populares en todas las categorías. Es importante recordar que el último incremento había sido reglamentado para pagarle el servicio a la policía y así mejorar los operativos de seguridad en las canchas. . .
Cristiano Ronaldo no jugará en el flamante campeón Lanús, Carlos Tevez no volvió a Boca, Lionel Messi no se mudó a Rosario para jugar en Newell´s y Kaká no será dirigido por Miguel Micó. Pero a partir de este torneo Clausura 2008, la entrada para un partido de Primera División será de 24 pesos, lo que representa una suba de un 71 por ciento. De ahora en más, para ver un encuentro de la B Nacional se deberá abonar 18 pesos (antes costaba 12, lo que significa un 50 por ciento más). ¿Qué pasará con la Primera B? De $10 pasó a $14 (40 por ciento más). En la C, de $6 a $10 (66 por ciento más) y en la D antes costaba $4 y su nuevo valor es de $6 (50 por ciento más caro).
No. No es como usted piensa: en San Lorenzo la policía seguirá colocando esas vallas sobre el acceso visitante para que se tarde una hora en ingresar; cuando suba hacia la tercera bandeja de la Bombonera lo escupirán desde las otras dos; en el interior del país seguirán reprimiendo, en los peajes anteriores a destino, a los hinchas que lleguen desde Buenos Aires; en Avellaneda, Banfield y Argentinos Juniors será notable la falta de control para que los visitantes no sean más del 50 por ciento que permita la tribuna; la reventa estará ante los ojos de todos; lo seguirán reteniendo luego de los 90 minutos –ya no importa si es hincha local o visitante, si no que le pregunten a los de Racing que tuvieron que esperar 20 ó 25 minutos luego de visitar a Huracán en Paternal el torneo pasado- y las plateas para ver al equipo que pelea el campeonato en las últimas fechas estarán casi a la altura de un Super Bowl.
Luego de tantas decisiones premeditadas para alejar al público de los estadios, por intermedio de diferentes medidas insólitas, desde la dirigencia de la AFA se busca que se vayan todos los hinchas de las tribunas y vean los partidos por televisión. Pero los que se tendrían que ir son quienes le hacen tanto mal a este fútbol, tanto daño. Esos que se llenan la boca con sermones que se venderían solos, si realmente fueran alcanzables y no sólo utopías que quedan en la nada. Porque luego clavan el puñal por la espalda en reuniones fantasmas de un día para el otro. Julio Grondona, José Luis Meiszner, José María Aguilar, Pedro Pompilio, todos los miembros del Comité Ejecutivo que hayan aprobado esta última estafa, el Tribunal de Disciplina, Javier Castrilli y demás.
A todos ellos, los hinchas del fútbol argentino les piden que se vayan, que se vayan todos. . .

viernes, 18 de enero de 2008

A 25 años de un triste adiós


"La democracia Argentina necesita perfeccionamiento, pero que quede bien establecido: perfeccionamiento no es sustitución totalitaria. El concepto social de la democracia no es nuevo, y no es sólo nuestro. Más lo importante no es que el sentido social de la democracia esté en nuestras declaraciones políticas o estatutos partidarios, sino que los argentinos tengamos la decisión y la valentía de llevarlo a la práctica. Pero deseamos desde ya alertar a quienes conciban a la democracia social como un simple proceso de distribución. Para que pueda existir justicia de la sociedad para con el hombre es necesario que éste, a su vez, sea justo para con la sociedad y no le niegue o retacee su esfuerzo".
Arturo Umberto Illia, al dirigirse a la Asamblea Legislativa cuando asumió como Presidente de la Nación. Hoy, 18 de enero de 2008, se cumplen 25 años de su muerte.

miércoles, 2 de enero de 2008

A 3 años y 3 días


Llegaremos

Él no te dejó,
él siempre está.
Aunque en esa trampa cayó
y nadie lo comprenderá . . .

Su luz sigue encendida,
fría multitud egoísta.
La verdad será descubierta
a pesar de que sangre la herida.

Lo que te mantiene vigente
(ese rezo bendito),
también nos sostiene a nosotros
desde este infierno infinito.

Zapatillas sin nombre,
vivirá tu voz en mi mente.
¡Qué abandono, justicia pobre!
Mirame desde arriba y dibujame el presente.

Tristeza voraz
y altares de llanto.
Risas, no más,
en este cruel desencanto.

El sol nos guiará,
difícil camino de espinas.
Tu fuerza, mi lucha.
Y cerrarán las heridas . . .
(¡¡yo sé que sí!!).